(C) 2011 - 2023 Hugo Rodríguez V.

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domingo, 28 de agosto de 2011

Abya Yala en el ciclo “Charangos en Argentina”

Desde hace diez años viene desarrollándose, con no poco esfuerzo, el Ciclo “Charangos en Argentina”, organizado por Adriana Lubiz, Luis Pérez, Carlos Ochoa y  muchas otras personas que aman la sonoridad de este instrumento. El concierto de esta noche ha estado dedicado al músico y luthier Jorge “Chiquito” Rodríguez.

Viernes 19 de agosto de 2011
Centro Cultural Unión Ferroviaria
Av. Independencia 2880, Ciudad de Buenos Aires



         En Argentina siempre hemos tenido muy buenos charanguistas. El precursor de este instrumento en nuestro país ha sido, sin dudas, Jaime Torres, quien luchó contra viento y marea para darle la difusión merecida a este noble instrumento.  El problema ha residido precisamente en la escasa difusión de esta música. Torres, y todos los amantes de estas sonoridades andinas, se  benefició con el llamado “boom del folklore” de los años 60, llegando a grabar con Ariel Ramírez, Mercedes Sosa y muchas grandes personalidades de nuestra música. Pero poco se ha sabido de otros ejecutantes de este instrumento de cuerdas. Ha pasado mucho tiempo desde aquella época; felizmente encontramos músicos jóvenes interesados en el charango y no sólo en su faceta más folklórica, tal como hemos reseñado desde este sitio.

         Entre las virtudes del ciclo “Charangos en Argentina” podemos citar la posibilidad de que los alumnos puedan mostrar su arte en público. Este viernes 19  ha sido la oportunidad para apreciar la labor del maestro Héctor Mancilla  y sus discípulos. Gonzalo Laferrera nos ofreció la obra “La partida”, de Víctor Jara, bella y de cierta complejidad. Gonzalo supo salir airoso del enorme desafío; algún pequeño error pudo ser subsanado por el loable esfuerzo en ofrecer una hermosa interpretación. Seguidamente se presentaron Andrés Urdiciain (charango) y el maestro Mancilla (guitarra) para ofrecer una exquisita versión instrumental de la clásica zamba “El Antigal”, de Ariel Petrocelli, con música de Daniel Toro y Lito Nieva.
Como número principal se anunciaba la actuación de Abya Yala, agrupación musical formada en 1989. Su nombre proviene del nombre dado por el pueblo kuna de Colombia y Panamá, antes de la llegada de los colonizadores europeos, al continente que hoy conocemos como América.  El primer disco de Abya Yala se tituló  “América en música y palabras”. A lo largo de los años, el grupo se presentó en importantes salas de Buenos Aires y el resto del país, publicando otros dos discos entre los años 2000 y 2002, preparando un tercer CD que estaría disponible a fin de año. Hoy sus integrantes son Horacio Salazar (vientos), Horacio Baylis (bajo eléctrico), Ernesto Salazar (percusión), Oscar Russo (charango, guitarra y tiple), Jorge Giorno (percusiones) y Nahuel Toucedo (flauta traversa). Para esta presentación se ha sumado uno de los miembros fundadores del grupo: Adriana Lubiz en charango.


Abya Yala en "Charango Argentino"
(Foto: Facebook)


Si bien el grupo Abya Yala suele incluir canciones en su repertorio, esta vez el concierto fue enteramente instrumental. Comenzó la presentación con “Pampa Lirima”, un tema del compositor chileno Roberto Márquez, quien la grabó originalmente con el grupo Illapu en 1984. La versión de Abya Yala incluye un arreglo para flauta traversa, manifiesto hacia el final del tema. Esta característica de la agrupación le da un carácter especial; son ineludibles las influencias de corrientes del jazz en este conjunto, lo cual por un lado le brinda una importante singularidad, pero por otro la aleja de una sonoridad plenamente sudamericana que caracteriza a algunos grupos de los cuales toman temas para su repertorio. Una de las melodías en las que se luce el grupo es “Ven a mí”, de William Centellas. Abya Yala posee una gran fuerza interpretativa, manifestada a puro ritmo en obras de Oscar Russo, Lucho Sala y Ricardo Vilca, por ejemplo. En el tema Managua”, que estará presente en el nuevo CD, se destacan el charango y el bajo.

         Hacia el final de su interpretación, los músicos se van retirando de  a uno, pero previsiblemente regresan para ofrecer un bis: nada menos que “Tempestad”, de Alex Sánchez Bustamante, conocida originalmente por la versión del grupo Savia Andina. Más allá de las singularidades—cada solista se destaca plenamente en su instrumento—el grupo suena sólido, bien afirmado en el conocimiento del repertorio, realizando interesantes arreglos en base a los temas originales.


Más información.





miércoles, 17 de agosto de 2011

Entrevista a Ángel Tejeda, charanguista mexicano

Conocimos a Ángel Tejeda durante el Festival Internacional del Charango Buenos Aires 2010, donde interpretó un repertorio tan interesante como poco conocido en Sudamérica. En esta entrevista, el músico mexicano nos habla de su trabajo y sus gustos en materia artística.
Buenos Aires / México, Agosto de 2011




Cuéntanos de qué manera comienza tu afición por el charango
Mi primer encuentro con la música folklórica latinoamericana se da allá por 1972, unos amigos me invitan a un concierto del grupo mexicano “Los Folkloristas” aunque yo ya venia interpretando algunos temas latinoamericanos, fue después de ver a Los Folkloristas que me di cuenta que esta música era lo que yo quería interpretar, lo que realmente me satisfacía y hasta la fecha así es.
¿Qué autores e intérpretes han influido en tu obra?
Definitivamente la influencia mas fuerte en mi, son Mercedes Sosa, Jorge Milchberg  y Jaime Torres.
Cuando te presentaste en el Festival Int. Del Charango Bs. Aires 2010 sorprendiste gratamente con melodías mexicanas poco conocidas aquí. ¿Cómo evalúas la percepción de estas obras por parte del público presente?
Tomando en cuenta que el publico Bonaerense es conocedor y exigente, yo diría que fue muy buena, esto lo puedo decir por que vi la reacción y aceptación del publico, la ovación que me brindaron, las voces  de algunos que pedían otra, otra, otra … cuando esto sucede es porque ha gustado el trabajo de uno.
“Granito de sal” (trova de Yucatán) posee un ritmo bien marcado y una hermosa melodía. En México se recuerda la versión de Guti Cárdenas. ¿Qué opinas de este artista? ¿Qué te ha motivado a elegir este tema para tu repertorio?
Bien, aquí hay una confusión respecto del autor de “Granito de sal” este tema le pertenece a Pepe Domínguez, compositor e interprete importante de la música Yucateca, al lado de compositores como: Guti Cárdenas quien es autor de un tema llamado “Un rayito de sol” (aquí creo esta la confusión por el nombre tan parecido de ambos temas) y Ricardo Palmerin.  Escogí el tema “Granito de sal “para mostrar un panorama un poco más amplio de lo que es la música folklórica y popular mexicana, ya que, en el extranjero se conoce más lo que es la música de mariachi, debo mencionar que en México existe una gran variedad de música, un vasto repertorio tradicional que en lo personal me gustaría se conociera en el exterior. México no es solo música de mariachi.


Blas Galindo ha compuesto una variedad de obras para orquesta: cantatas, conciertos y música de mariachi. Tú interpretas la melodía de su canción “El son de la negra”: ¿qué nos puedes contar acerca de este tema?
Es un tema inamovible del repertorio de cualquier agrupación que se precie de llamarse mariachi, esto lo digo por que al igual que el charango, nuestro mariachi ha trascendido fronteras. El son de la negra es un icono, podría decirse que es nuestro segundo himno nacional, la entrada de cualquier mariachi en el mundo siempre es precisamente con este tema “… cuando me traes a mi negra que la quiero ver aquí, con su reboso de seda que le traje de Tepic…”

Un conjunto musical chileno de renombre internacional, Inti-Illimani, ha incluido el son huasteco “La Malagueña” en un disco del año 2002 (“Lugares comunes”), que se ha publicado en Chile, Argentina y España. ¿Conoces su versión? ¿Qué emociones te produce este  tema?
No he escuchado la versión de Inti pero si te puedo decir que me produce una gran alegría y satisfacción saber que un grupo de tanta trayectoria incluya en su repertorio un tema tan popular como lo es “La malagueña” del cual existen versiones muy bellas.
Ahora en agosto se celebra el Festival Int. Del Charango en Cusco (Perú) Cuéntanos tus expectativas sobre tu participación en este importante evento.
La expectativa mayor creo es…saber si los charanguistas de otros países se están interesando por integrar temas de música mexicana en sus respectivos repertorios.
¿Has grabado algún CD?
Estoy  trabajando en eso, aun no selecciono la totalidad de temas que quiero grabar, hacen falta algunos arreglos musicales. Cuando este terminado el trabajo se los haré saber para comenzar su difusión.
¿Tienes pensado presentarte en Argentina?
 Me gustaría mucho volver a Argentina  así que… invítenme
Por último, ¿puedes nombrarnos a charanguistas argentinos con quienes tengas una afinidad especial?
Jorge Milchberg, Rodolfo Ruiz, Jaime torres, Adriana Lubiz, Aldana Bello, Enzo Espeche…..creo que con todos los charanguistas argentinos.

Muchas gracias por tu tiempo. Éxitos en Perú y hasta pronto.

domingo, 14 de agosto de 2011

Tercera Noche de Charanguistas

Continúa el excelente ciclo organizado por Patricio Sullivan y Juan Pablo Gau, integrantes de “Charangoentrío”. Como es costumbre, son los anfitriones los encargados de abrir el recital. Patricio nos regala una composición propia, a la que relaciona con la nostalgia de tiempos infantiles: Calesita. Juan Pablo se une para interpretar los dos temas siguientes: Manantial  y una exquisita versión de Libertango, portentosa obra de Astor Piazzolla  expresada fielmente desde el charango y la guitarra de estos talentosos músicos.

Patricio Sullivan y Juan Pablo Gau


Uno de los protagonistas principales de la noche es el charanguista santafesino Oscar “Poli” Gomítolo, muy conocido en el ámbito musical no sólo por su gran trayectoria como solista de este instrumento, sino también como uno de los organizadores del Festival “Sonamos Latinoamérica”. “Poli” Gomítolo ofrece interesantes puntos de vista en la ejecución de sus obras: comienza tocando un aire de huayno llamado Ailén, en homenaje a su hija mayor. Es una obra que propone cierta abstracción respecto a la música tradicional, y a la vez incorpora algunos rasgos rítmicos que rememoran el repertorio tradicional brasileño. En cuanto a El arriero, canción criolla de Atahualpa Yupanqui, Oscar aclara que la suya es una versión y no un arreglo del tema. Al oído del espectador semeja a variaciones sobre el tema original, una posición interesante que evoca un sonido “ancestral”.

Oscar "Poli" Gomítolo


Enlace al video "El arriero" en Noche de Charanguistas: http://www.youtube.com/watch?v=elx9zLsdGF0&feature=related

 
Gomítolo incorpora el cuatro a su repertorio: con este hermoso instrumento venezolano comparte el merengue Compadre Pancho, ritmo en 5 que tiene su gracia en el ritmo y en la letra. Como bis, una melodía del repertorio andino: Mis llamitas, de Ernesto Cavour.


Juan Pablo Gau nos presenta al grupo Jácara: “son cuatro músicos jóvenes muy talentosos, que hacen música con mucha frescura.” “La idea es mostrar distintas facetas del charango: armónica, percusiva…” Estas alabanzas quedarán de manifiesto en las interesantes versiones que escuchamos en la voz de Victoria de la Puente, comenzando con el tema tradicional La cocinerita y la Huella de ida y vuelta, de Roberto Yacomuzzi y José Gerardo Molina. Violeta luce una voz interesante, plena, y con los matices necesarios para entonar canciones muy distintas con elocuente versatilidad. Sigue la bellísima Canción de Trilce, de Daniel Viglietti, inspirada en una canción tradicional chilena. Marilina Witko, charanguista del grupo, apenas se luce con su instrumento tapada por la expresividad del piano y las percusiones; también aporta su obra Mate adentro, mostrando su mirada joven e interesante de la canción actual.


Marilina Witko (izq.) y Victoria de la Puente

Sergio Desanze se luce en teclados, aportando arreglos interesantes, sobre todo en temas que originalmente están escritos para otros instrumentos, y también canta algunos temas secundando a Victoria. La chacarera En la vida, de Carlos Aguirre y el huayno Plantita de alelí son buenos ejemplos de ello. Pero no es sino en Manifiesto, la famosa creación de Víctor Jara, donde aflora la profunda fuerza creadora e interpretativa del grupo: instrumentaciones y voces intensas por momentos, sutiles por otros, que marcan un cuidado arreglo. Las percusiones de Emilio Bascans también suman a la noble instrumentación de Jácara: platillo, bombo y cajón peruano que suenan fantásticos. Una de las últimas canciones es El surco, de la cantautora peruana Chabuca Granda, en la que una vez más la dulzura de Victoria se destaca notablemente. Como bis, una zamba de Marilina titulada Encrucijada.


Emilio Bascans (der.) en percusión


Sergio Desanze (teclados)

Grupo Jácara

Más información:





Espacio Tucumán
Suipacha 140 PB, Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Tel. (011) 4322-0010 int. 115 / 132

LO QUE SE VIENE:

miércoles, 10 de agosto de 2011

Raíces Incas: Lo Mejor




RCA / Sony Music 8869 793347 2 (Formato CD)
Edición argentina

            Mientras que en países vecinos como Bolivia y Chile la música de raíz andina se desarrollaba incorporando nuevas temáticas a partir de los años 60, en Argentina eran pocas las posibilidades de disfrutar de este repertorio por agrupaciones locales, sobre todo lejos del noroeste de nuestro país. Raíces Incas, agrupación nacida en 1977 por iniciativa del músico y luthier Jorge Luis “Chiquito” Rodríguez, vino a ocupar un espacio importante dentro del folklore nacional. De esta forma, ha realizado un gran aporte con el sonido de sikus, zampoñas, charango, moxeños, guitarra y percusiones, sumando a lo mejor de la ancestral cultura andina, versiones en estos nobles instrumentos de clásicos de nuestra música.
            Raíces Incas debutó en el Festival de La Falda (provincia de Córdoba), firmando poco después un contrato discográfico con el prestigioso sello RCA. En 1978 aparece su primer disco: “Cae la noche, sopla el viento…”; al año siguiente el grupo realiza una gran gira por toda la Argentina. En tanto, Japón los escucha en el año 1983, cuando ya habían publicado tres discos más, consagrándose en buena parte del mundo. De regreso al país, participan en la grabación de un álbum del dúo uruguayo Washington Carrasco y Cristina Fernández, recordándose de aquellas sesiones el excelente tema “Somos la sal del mundo”. En 1984, tras la edición del LP “Música de los Andes”, el grupo finaliza una primera etapa, dejando de actuar y grabar hasta 1999, cuando aparece el disco “Andes soul”.
            Después de siete años de inactividad, Raíces Incas vuelve a reunirse para deleite el numeroso público admirador de la música andina. Acompaña a Carlos Di Fulvio en el espectáculo “De la Patagonia a la Puna”, retomando definitivamente la actividad artística en 2010, presentándose en el ciclo “Charango Argentino”. Este año pudimos disfrutarlos en el Espacio Tucumán, dentro del espectáculo “Noche de charanguistas” (ver reseña en este mismo blog).
            Para comenzar a hacer justicia con la (no tan) breve y fructífera labor de esta agrupación nacional, el sello donde grabaron la mayor parte de sus melodías y canciones publica una selección de sus discos, versiones que aparecen por primera vez en disco compacto. Si bien consideramos que las antologías no son la forma óptima de disfrutar la labor de los artistas, al menos podemos tomar contacto con parte de una época de esplendor de Raíces Incas en esta selección hecha por el propio director del grupo, “Chiquito” Rodríguez. El disco hace honor al título elegido, ya que el repertorio “no tiene desperdicio”, como se dice coloquialmente. Comienza el fonograma con el tema Cuando muere el angelito, de Eugenio Inchausti y Marcelo Ferreyra, versión instrumental que rememora la versión cantada por Mercedes Sosa. Warmiwawa y Romance de viento y quena, ambas pertenecientes a su primer disco, explotan al máximo las virtudes del grupo (vientos, percusiones y cuerdas). En la citada Warmiwawa y en Artesano del viento, se nota el arte—como luthier, autor e intérprete –de Jorge Rodríguez, profundo conocedor de las sonoridades de las cañas andinas. El sonido “autóctono”, o bien lo que marca la “argentinidad” de estas interpretaciones, está acentuado por la excelente utilización del bombo.
            A la tranquilidad sugerida por Mi pueblo azul, creación del recordado artista riojano Ramón Navarro le sigue la intensidad de Chola cuencana, donde vuelven a notarse las particulares virtudes de Raíces Incas. Es también una de las pocas versiones cantadas.  También hay lugar para versiones de melodías compuestas originalmente para otras instrumentaciones: el clásico Puentecito de mi río, de Buenaventura Luna, Diego Canales y Antonio Tormo, en una interpretación muy pintoresca y los chamamés Merceditas y Kilómetro 11. Son canciones que emocionan porque están presentes en el corazón del pueblo argentino, ya forman parte de nuestro acervo cultural.
            El charango se luce especialmente en el tema Volverás, del recordado autor e intérprete boliviano William Ernesto Centellas (1945-2009). Perú está presente en esta selección a través del “infaltable” “El cóndor pasa”, de Daniel Alomía Robles, cuya coautoría la contraportada del CD atribuye erróneamente a Jorge Milchberg y Manuel Clavero, siendo éstos en todo caso arregladores o versionistas de aquella obra, que forma parte de una zarzuela compuesta en 1913. El ritmo se denomina cashua, es similar al huayno, y la letra original está escrita en idioma quechua. A todo esto cabe agregar que ésta es una hermosa versión, ejecutada impecablemente, como todo el resto del repertorio del disco. Otro de los temas que se destacan es “Agüita de Phutiña”, motivo tradicional boliviano de gran belleza.