El compositor e intérprete porteño estuvo presente en este tradicional espacio de la ciudad.
Recital de Nicolás Cardoso
Feria de Mataderos
Avenida de los Corrales y Avenida Lisandro de la Torre
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Argentina
Domingo 15 de mayo de 2025
La Feria de Mataderos(oficialmente Feria de las Artesanías y Tradiciones Populares Argentinas) nació el 8 de junio de 1986 en el barrio porteño de Mataderos, realizándose frente a la recova del viejo mercado. Está compuesta por más de 300 puestos donde se venden artesanías (mates, platería, mantas, ponchos) y productos gastronómicos de las provincias del norte (alfajores, confituras, conservas). Hay también locales de comidas típicas y un escenario donde se realizan espectáculos gratuitos a cargo de artistas folklóricos de todo el país.
Nicolás Cardosoes músico, compositor e intérprete nacido en la Ciudad de Buenos Aires. Ha cursado estudios en la prestigiosa Escuela de Música Popular de Avellaneda (EMPA) y se ha presentado, desde hace varios años, en diferentes escenarios del país mostrando su arte. Ha publicado los discos "Sapikuna" (2010), "El canto del viento (Yupanqui en charango)" (2016), "Wiphala - Cuerdas de nuestra tierra" (2020, en dos volúmenes),"Cuerdas" (EP, 2020), "Ukumanta" (2021) y varios singles aparecidos entre 2022 y 2025 que contienen tanto temas propios como versiones de afamados compositores. Todos ellos están disponibles para su escucha en las principales plataformas digitales.
Nicolás Cardoso
El recital comenzó con varios temas propios, siendo el primero el bailecito Tres tres, tocado en guitarra. La melodía conjuga una especial introspección creativa con el tradicional ritmo norteño. La identificación del artista con la cultura y los paisajes de esta región se refleja en el desarrollo de cada melodía, ofrecida con sencillez y generosidad. La Zambita del Xibi Xibi, "inspirada en el paisaje alrededor de ese río jujeño" es otro de los grandes hallazgos en el repertorio de Nicolás. A través de las cuerdas punteadas de su instrumento, con especial hondura, el protagonista de esta tarde nos adentra en un clima sumamente descriptivo de colores y sonidos que se despiertan en nuestra imaginación.
Otra zamba, titulada Esperando, tuvo su estreno en 2023 a modo de single. La portada del disco, en escala de grises, parece trazar un paralelo con los contrastes de las cuerdas que van hilvanando la melodía en preciosa divagación poética y musical. Nuestros lectores podrán apreciar la versión en vivo a través de este registro:
Video: Esperando
Nicolás Cardoso
La guitarra dio paso al charango, para que el compositor e intérprete porteño, quien manifiesta "un sentido de pertenencia muy fuerte con la región del NOA y su música", nos deleitara con dos cuecas. La primera de ellas fue La entreverada, que forma parte del primer volumen de "Wiphala" (2020). La ductilidad de Nicolás con el instrumento de origen andino se manifestó una vez más a través de un relato melódico sumamente emotivo. Le siguió Tilián, en homenaje al pueblo originario que habita al sur de la Quebrada de Humahuaca. En el video compartido a continuación puede disfrutarse esta singular creación:
Video: Tilán
Nicolás Cardoso
Hacia lo que parecía ser el segmento final de su actuación, Nicolás nos ofreció escuchar su huayno Chaski, evocativo de una era fascinante y aun poco conocida: la de los mensajeros del Inca en tiempos prehispánicos. A pedido del público, y con la complicidad del animador Julio "El Chelco" Rodríguez, en artista continuó brindando sus melodías para la audiencia que disfrutaba una tarde soleada en Buenos Aires.
Julio Rodríguez
El célebre Estudio para charango del maestro Mauro Núñez (1902 - 1973) fue el primero de los temas que dio pie al baile popular. Nicolás nos ofreció su personal versión, que conserva la esencia original del destacado creador y luthier chuquisaqueño:
Video: Estudio para charango
Nicolás Cardoso
Bailecito del viento referencia al género nacido en Bolivia y afincado en amplias regiones del norte argentino. Al igual que Arbolito, cueca tradicional boliviana, fueron dos de las melodías celebradas por la audiencia a puro baile.
La Zamba de Lozano (Manuel José Castilla y Gustavo "Cuchi" Leguizamón) comenzó con los suaves punteos de las cuerdas del charango y continuó con el canto y el recitado de "El Chelco" Rodríguez, a la vez que las parejas amenizaban con la danza, tal como puede apreciarse en este registro audiovisual:
Video: Zamba de Lozano
Nicolás Cardoso y Julio Rodríguez
El gran cierre fue con el takirari Oh, Cochabamba querida del compositor boliviano Jaime del Río (1921? - 1973). El contagioso ritmo, que parece tener origen en antiguos rituales prehispánicos, ha sido el broche de oro de esta actuación de Nicolás Cardoso en la Feria de Mataderos.
El charanguista entrerriano Nicolás Faes Micheloud aborda en el instrumento andino una de las obras más célebres de Bach.
"Transfiguración"
Partita N° 2 en re menor BWV 1004
de Johann Sebastian Bach
Nicolás Faes Micheloud (hatun charango)
Producción Independiente
Argentina, 2025
Disponible en plataformas digitales
Johann Sebastian Bach(1685 -1750) ha sido uno de los compositores más reconocidos de su época. "Su fecunda obra es considerada la cima de la música barroca". [1] La Partita N° 2 para violín solo N° 2, BWV 1004 en re menor(1720) es la cuarta de las seis Sonatas y partitas para violín solo. Esta, así como muchas otras obras de Bach, ha sido objeto de numerosas transcripciones: para piano, guitarra, piano y violín, marimba, órgano, fagot e incluso para orquesta completa. En cuanto a instrumentos andinos, el músico argentino Raúl Mercado(1934 - 2005) adoptó para tocar en quena la Invención en La menor, la Fuga N° 2 en Do menor , el Aria célebre, el Preludio N° 1 en Do mayor y el Largo del Concierto para piano N° 5 en fa menor. Por su parte, el conjunto chileno Barroco Andinograbó varios discos con música de Bach en los que prevalecen las sonoridades de charango, quenas y zampoñas. Uno de los discos, dedicado íntegramente a la música del compositor alemán, fue dado a conocer en 1975 e incluye la segunda grabación de la famosa Badinerie perteneciente a la Suite N° 2.
Nicolás Faes Micheloud(Paraná, 1986) es músico y docente egresado de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER). Comenzó a tocar guitarra a los 11 años de edad. Más adelante tomó contacto con el charango a través de un disco de Ariel Ramírez y Jaime Torres, interesándose vivamente por el cordófono andino. Una vez que pudo tener su propio instrumento, Nicolás comenzó a tomar clases, primero en su ciudad natal y posteriormente en la provincia de Jujuy. Em 2009 viajó a Perú para especializarse con el maestro Federico Tarazona. Esa especialización "fue básicamente técnica y en hatun charango" nos contaba Nicolás en entrevista exclusiva en 2021. Durante su participación en el Congreso del Charango, celebrado en Buenos Aires en agosto de 2022, el maestro Tarazona nos ilustraba acerca de este instrumento: "el hatun charango lleva ese nombre más que nada por la grandeza de sus posibilidades. Porque hatun es una palabra quechua que tiene connotación de tamaño, de talla. A este instrumento lo bauticé hatun charango, pero traducido al español como "el gran charango", y eso por sus posibilidades técnicas, por sus posibilidades acústicas, por sus posibilidades armónicas y por la gran capacidad que tiene para poder desarrollarse un canto polifónico: lo pueden tocar como en el caso de la guitarra: a dos, a tres o a cuatro voces, cosa que no se hace comúnmente con el charango o difícilmente se pueda lograr con el charango tradicional".
"El hatun charango nace realmente, físicamente, en el año 2001 (...) En aquel entonces yo estaba haciendo estudios de especialización en guitarra clásica y composición. Tenía el interés de explorar en el charango obras que trabajaba en guitarra, principalmente obras del período barroco , obras de Johann Sebastian Bach. Era consciente que con el charango tradicional se pueden abordar ciertas obras, pequeñas suites, pero una Gran Partita de Bach es imposible. (...) La diferencia entre el charango (y el ronroco) con el hatun charango es que éste posee tres órdenes de cuerdas más. (...) y "este instrumento tiene cuerdas simples y no dobles, como el charango tradicional".
Respecto a la Partita N° 2, la adaptación a hatun charango corresponde a Nicolás Faes Micheloud. Está compuesta por cinco movimientos:
I. Allemande
II. Courante
III. Sarabande
IV. Gigue
V. Chaconne (Ciaccona)
El artista comparte que "este trabajo condensa años de dedicación a este repertorio que disfruto mucho tocar y que, a su vez, me ha desafiado intensamente". Cabe destacar la bella musicalidad que el artista ha logrado transmitir en este instrumento de inspiración andina que, tal como lo dijera su creador, tiene mayores posibilidades armónicas y técnicas que otros cordófonos similares. El aporte de Nicolás está a la altura de los más importantes concertistas internacionales, a la vez que reafirma el enorme valor del charango en la cultura de los pueblos sudamericanos.
La segunda parte del evento se realizó en el Auditorio, contando con la presencia de importantes artistas.
Charangos en Concierto
Centro Cultural "Benito Quinquela Martín"
Dr. Delfor Díaz 1660,
Hurlingham,
Provincia de Buenos Aires
Argentina
Domingo 1° de junio de 2025
El ciclo "Charangos en Concierto" surgió en 2018 en el municipio de Hurlingham por iniciativa de Laura Font, Eduardo Puchetay un grupo de entusiastas músicos y docentes locales. Desde entonces, y con apoyo de la Subsecretaría de Cultura municipal, viene desarrollando actividades artísticas y formativas abiertas a toda la comunidad, de manera gratuita.
Este año el primer concierto se realizó en la ciudad de Luján, el día 5 de abril, con la presencia del Taller de Instrumentos Autóctonos de esa ciudad más la Orquesta "Raíces" de Moreno, el dúo Lea Errecalt y Silvana Delgado, Daniel Cravero con Eduardo Pucheta y Quirquincho Ensamble. Algunos de estos artistas también estuvieron presentes en este segundo concierto del año, esta vez en la tradicional sede de Hurlingham.
El señor Leandro Tartaglia, Subsecretario de Cultura de este municipio bonaerense, destacó la labor cultural que se realiza de manera sostenida a pesar de ciertas dificultades de este tiempo. Puso énfasis en "marcar las directrices y el trabajo con la comunidad". También expresó que "Charangos en Concierto preexiste a mi gestión. Es importante apoyar y acompañar las ideas que existen", en clara alusión al desarrollo de este ciclo musical en sus seis años de vida. Deseó "que este proyecto crezca y que cada día seamos más", a la vez que valoró el carácter social de este evento: "es un lindo abrazo para estos momentos duros en Argentina".
Sr. Leandro Tartaglia
El primer artista en subir al escenario ha sido Leandro Errecalt, quien posee una importante trayectoria artística. Oriundo de Monte Grande, Leandro ha participado de ciclos como "Noche de Charanguistas" y "Charangos al Sur", además de ejercer como docente de charango desde 2015. Ha publicado en plataformas digitales su primer álbum, titulado "Gratitud charangera" (2020), compuesto por temas propios y de otros autores, y actualmente se encuentra abocado a la grabación de un nuevo disco junto a su pareja Silvana Delgado.
Lea Errecalt
En esta oportunidad acompañó a Leandro el talentoso y versátil guitarrista Facundo Barrios. Músico independiente de la ciudad de Hurlingham, Facundo es egresado del Conservatorio Superior de Música "Manuel de Falla". Ha acompañado en guitarra y aerófonos andinos a artistas como Aldana Bello, Suna Rocha, Silvia Fernández y Raúl Demaría, entre otros.
Facundo Barrios
El repertorio interpretado en charango y guitarra fue muy interesante, abordando obras de distintos autores y orígenes. La primera ha sido Presagio, una melodía de Ricardo Vilca (1953 - 2007), el notable músico y maestro rural originario de Humahuaca (Jujuy). La versión, desarrollada con minuciosa musicalidad, recreó el recuerdo del compositor quebradeño en la imaginación de los oyentes. Le siguió un popurrí integrado por el vals Palomita blanca (1929), de Anselmo Aieta y Francisco García Jiménez, el tango El choclo (1938), de Ángel Villoldo, y la Milonga de mis amores (1937) compuesta por Pedro Laurenz y José María Contursi. Ha sido un delicioso coloquio de cuerdas en ritmo tanguero muy aplaudido por la audiencia.
La huarmicita es un takirari de Ernesto Leiva y Servando Giménez. El nombre proviene del vocablo quechua warmi (mujer) y el sufijo diminutivo "cita", pudiéndose traducir como "mujercita". Esta versión, cantada por Facundo, puede apreciarse en el registro adjunto:
Video: La huarmicita
Lea Errecalt + Facundo Barrios
Oscar Miranda, nacido en 1975 en Guaymallén (Mendoza) es un músico autodidacta desde temprana edad. Estudió en el Conservatorio Nacional "Carlos López Buchardo" de la Ciudad de Buenos Aires y ha registrado varios discos de gran interés, como "Che charango" (2005), "Cordillera" (2008) y "Puente del Inca" (2013). De su variado repertorio, Leandro y Facundo han seleccionado el tema instrumental Argentina, más conocido por su subtítulo El Kalafate.
Leandro habló sobre el orgullo de tocar charango y la vergüenza o incomodidad de tener que aclarar en algunos espacios que su instrumento no es un ukelele. También destacó la importancia de otros instrumentos que forman parte de nuestra identidad como la quena y los sikus, agregando que "ningún Pichetto nos va a cuestionar la pertenencia de estos instrumentos a nuestra cultura". Esto se refiere a las palabras del diputado nacional Miguel Ángel Pichetto, quien en marzo pasado afirmó que "el charanguito y la música del norte no tienen nada que ver con Argentina".
Amigo Centellas, obra instrumental de Willy Ríos, está dedicada a la memoria del charanguista William Ernesto Centellas (1945 - 2009). Este músico ha sido una de las figuras más relevantes de la cultura boliviana del siglo XX.
Video: Amigo Centellas
Lea Errecalt + Facundo Barrios
Finalmente, y a pedido del público, el dúo nos deleitó con la chacarera Sinfonía Silvestre, obra de Juan Carlos Carabajal y Onofre Paz, cantada por Facundo.
Como es habitual en este ciclo, la presentación de cada artista ha estado a cargo del locutor Guillermo Giménez, quien nos ilustró con la trayectoria y los méritos de quienes se han ido presentando a lo largo de la tarde-noche en el Quinquela.
Guillermo Giménez
Rocío Leiríaes Licenciada en Folklore, especialidad en Instrumentos Autóctonos, en la Universidad Nacional del Arte (UNA). Forma parte de la Orquesta Tunquelén (Garín) y del dúo Cuerdas Solidarias. En esta oportunidad la acompañó el guitarrista Emanuel Díaz.
Rocío Leiría
La calandria, chamamé de Isaco Abitbol y Julio Montes abrió esta parte del concierto. Del litoral nos transportamos imaginariamente a la ciudad de Buenos Aires a través de la Milonga de mis amores (Laurenz - Contursi). La ejecución, por momentos, exhibió las dificultades de tocar una obra compleja. No obstante, el sentido brindado por ambos intérpretes fue cálido y apasionado.
Emanuel Díaz
El mercedino, gato de Manuel López y Alfredo Alfonso representó a la región de Cuyo a través del sonido del charango y la guitarra:
Video: El mercedino
Rocío Leiría y Emanuel Díaz
Una de las mejores versiones vertidas por el dúo de Rocío y Emanuel ha sido la vidala Te he'i de olvidar (recopilación de Andrés Chazarreta). Le siguió una linda versión del Estudio para charango de Mauro Núñez (1902 - 1973), gran artista boliviano.
Como bis pudimos disfrutar de la cueca Arbolito (popular boliviana) que aquí se difundió ampliamente bajo el nombre La bolivianita.
Quirquincho Ensamblees un conjunto local formado por docentes y músicos que abrevan "de herencias tradicionales de Argentina y Sudamérica", además de interpretar creaciones propias. Quirquincho ha actuado en la edición 2024 del Festival Internacional "Charangos del Mundo", realizado en la ciudad de Rosario, en el ciclo "Charangos al Sur" (Lanús, 2024) y en el espectáculo "Charangueando en la huella de Jaime Torres" (Quilmes, 2024), además de los habituales eventos aquí en Hurlingham.
Quirquincho Ensamble
En esta oportunidad subieron a escena alumnos avanzados de charango y ronroco. Los dos primeros temas fueron tocados por los integrantes originales Diana Sá y Mabel Paradela (charangos), Laura Font (ronroco) y Eduardo Pucheta (guitarra). La actuación de este conjunto comenzó con el joropo Quitapesares, de Carlos Bonnet (1892 - 1983), compositor, director musical y militar oriundo de Villa de Cura (estado Aragua, Venezuela). Las sonoridades de los charangos emularon la dulzura típica del cuatro venezolano en emotiva versión.
Eduardo Pucheta
Escondido de mi país, composición de Gustavo Patiño, contó con la voz de Mariela Volpe, artista habitual de este espacio. Canto e instrumentos se fusionaron hermosamente en una obra de profunda raigambre argentina.
Video: Escondido de mi país
Quirquincho Ensamble + Mariela Volpe
En los dos temas siguientes se incorporaron al grupo Miguel Valdivieso, Roberto Kupietz y Romina Ozan (charangos) más Néstor Godoy y Raúl Vergara (ronrocos). El grupo interpretó Caminante, de Ricardo Vilca, y Camino al norte, zamba carpera de Eduardo Pucheta.
Se realizó un receso de unos 15 minutos para poder compartir una infusión y algunas delicias como pepas y tortas de distintos sabores. Tuvimos la alegría de encontrarnos con músicos de diferentes localidades que estaban presentes entre la audiencia.
Al reanudarse el espectáculo se preparó el escenario para la actuación del Taller de Charangos del Quinquela, dirigido por Diana Sá. Sus integrantes son: Roberto Kupietz, Raúl Vergara, Carmina Villarroel, Marcela Jaller, Romina Ozán, Mabel Paradela, Miguel Valdivieso y Néstor Godoy, acompañados en guitarra por Raúl Pucheta. El grupo tocó la cueca tradicional Arbolito (conocida en Argentina como La bolivianita).
Video: Arbolito [La bolivianita]
Taller de Charangos del Quinquela
La Agrupación de Cuerdas y Bombo Folklóricoestá integrada por alumnos de los talleres de guitarra, folklore, charango y bombo folklórico dirigidas respectivamente por Eduardo Pucheta, Diana Sá, Laura Font y Guillermo Giménez. Esta noche interpretó una Selección de carnavalitos compuesta por Canción y huayno (Mauro Núñez y Orlando Rojas), Hoy estoy aquí (Tarateño Rojas) y Hasta otro día (popular recopilado por Rafael Rossi).
Video: Selección de carnavalitos
Agrupación de Cuerdas y Bombo Folklórico
La Orquesta Folklórica Popular de Hurlinghaminterpretó cuatro temas, algunos de ellos junto a la cantante Mariela Volpe. El primero de ellos fue la zamba Camino hacia la Puna, de Víctor Hugo Barrojo (1951 -2006). Este compositor, porteño de nacimiento y jujeño por "adopción", formó parte de los grupos Los Jujeñitos y Las Voces del Teuco. En 1974 el conjunto Los Changos del Huaico, que había fundado un año antes, se consagró como "Mejor grupo instrumental" en el Festival Nacional de Folklore de Cosquín. Desde hace algunos años se celebra en Jujuy el Festival Homenaje a Víctor Hugo "el Gordo" Barrojo, en honor a su persona y su trayectoria artística.
Mariela Volpe
Gilberto Rojas (1916 - 1983) ha sido un músico, compositor y educador boliviano nacido en Oruro. Estudió en el Conservatorio Nacional de Música de La Paz. Fue miembro de diferentes grupos a través de los que difundió su obra, a la vez que ejercía como docente. Entre sus melodías más conocidas figura el takirari Negrita, que la Orquesta ha interpretado con pasión y profesionalidad.
Video: Negrita
Orquesta Folklórica Popular de Hurlingham
Miembros de la Orq. Folklórica Popular de Hurlingham
junto a Mariela Volpe
La zamba carpera Saltita, de Roberto Ternán, es otro de los grandes hallazgos en el repertorio de la Orquesta, que cerró con una linda versión de Sirviñaco, clásica composición de Jaime Dávalos y Eduardo Falú. En el video puede apreciarse a una pareja de baile.
Video: Sirviñaco
Orq. Folklórica Popular de Hurlingham
con Mariela Volpe y bailarines
Para el gran final comunitario se sumaron a escena los músicos que habían actuado anteriormente más Leandro Guancoy Pablo Lozano, presentes entre el público. Las canciones interpretadas fueron Pachamama (Pachi Herrera y Ramiro González), Caña y tambor, cumbia de Charo Bogarín y La cultura es la sonrisa. Esta última, en ritmo de chamarrita, fue compuesta por León Gieco en 1980 como protesta por el cierre de la Universidad Nacional de Luján durante la dictadura cívico-militar. Actualmente ha sido resignificada ante ciertos personajes que niegan la pertenencia de algunos instrumentos folklóricos a nuestra cultura argentina.
Video: La cultura es la sonrisa
Orquesta Folklórica Popular de Hurlingham
con L. Errecalt, F. Barrios, R. Leiría, E. Díaz, L. Guanco,
P. Lozano y Mariela Volpe
Agradecimientos especiales a
Laura Font
Subsecretaría de Cultura del Municipio de Hurlingham.
La primera parte del evento estuvo protagonizada por el luthier Guillermo Soria, quien brindó un taller sobre bombo legüero.
Charangos en Concierto
Centro Cultural "Benito Quinquela Martín"
Dr. Delfor Díaz 1660
Hurlingham,
provincia de Buenos Aires
Argentina
Domingo 1° de junio de 2025
Taller
"Cuidado y mantenimiento del bombo legüero"
a cargo del luthier e investigador Guillermo Soria.
La charla comenzó con la presentación del locutor Guillermo Giménez: "Buenas tardes a todos los presentes. Es muy importante el encuentro de hoy, de mucha riqueza, de mucha calidad humana, artística, artesanal, este encuentro Charangos en Concierto 2025. Este 1° de junio nos encuentra aquí en el Quinquela dando el comienzo con una charla muy especial, particular, sobre uno de los instrumentos que nos identifica en nuestro país: el bombo legüero. Invitamos para esta apertura y esta charla sobre el bombo legüero a una persona que conoce esto porque tiene un camino recorrido en la luthería, como intérprete, ejecutor e investigador de este instrumento. Él es Guillermo Soria, que está aquí a mi derecha". [Aplausos]. "Luthier de bombos, Licenciado e investigador. Lleva más de 20 años construyendo, reparando y restaurando bombos en su taller de Ituzaingó. Sus instrumentos han llegado a diversos horizontes, tanto en el interior del país como a latitudes lejanas, como Rusia, Vietnam, China, Europa, Estados Unidos. En América hispana Cuba, Perú, Bolivia, entre otros lugares".
Guillermo Giménez
"Construye sus bombos de forma artesanal y conservando técnicas ancestrales, pero también se ha permitido incursionar en nuevas técnicas de construcción con materiales novedosos, fusionando conocimientos de otras disciplinas. Es Licenciado en Comunicación, sabe comunicar y él, entonces, nos va a transmitir un poco su sabiduría, lo que él ha cosechado en su andar en el camino de este arte que es la luthería, y también como intérprete de nuestro bombo legüero. Les voy a pedir otro aplauso a Guille y damos comienzo..." [Aplausos].
Guille Soria:"Gracias, Guille. Guille es amigo del barrio de hace mucho tiempo. En ese camino nos encontramos hace muchos años tocando bombo en una plaza, donde todavía--aquí en Buenos Aires--había muy pocas clases de bombo. Se sumaron varias personas como Guille y comenzamos a dar clases. Este bombo lo tenía él cuando comenzó a tocar y me lo dejó para reparar. ¿Cuántos años pasaron? Yo le cambié los parches y los tientos. En el bombo le había puesto la fecha: 2016. La reparación sigue en pie y sigue sonando."
Guillermo Soria
"Vamos a hablar algo más rápido, dinámico, casi sintético, sobre cómo mantener el bombo legüero. Dentro de lo que es la construcción del bombo se usa principalmente madera de ceibo, el bombo más santiagueño. Entre los bombistos y los luhiers hay algunas discusiones, algunos dicen que si no es de ceibo no es legüero, si este [izquierda en la foto] se llama legüero y este [a la derecha en la foto] es criollo. Este último está construido en una lámina de terciado. Hay toda esa discusión".
"El bombo tradicionalmente es un bombo cuyo cuerpo es de ceibo. Es un solo tronco ahuecado con gubia. En algunos casos más modernos se realizan las terminaciones en el interior con gubia, con cepillos. Como ustedes sabrán, el ceibo es la flor nacional. La característica principal del ceibo es que se trata de una madera muy liviana, muy porosa y muy fácil de trabajar. En el monte, en Santiago, no tiene otra finalidad, porque del ceibo no se puede hacer carbón, no se puede hacer leña, no se pueden hacer muebles, no tiene otra utilidad, se hacen instrumentos. Los aros son de quebracho blanco, también madera del note. Los parches son de chivo y los tientos son de suela. Es un auténtico instrumento criollo. No es como una batería: ustedes no van a encontrar acá herrajes, tornillos. Es todo Pachamama, es todo tierra. Es muy representativo del monte. Entonces cuando escuchan el bombo legüero ustedes van a escuchar el sonido del monte también, un poco del canto de las aves, el sonido del viento. Como decía Guille, es un instrumento muy representativo nuestro. Si recorremos mentalmente los tambores de otras partes del mundo (los djembé en África, las congas o el bongó en América Central, los tambores de candombe) cada tambor representa una región o pueblo. El bombo legüero nos representa como argentinos porque este instrumento nació acá. Tiene otras ascendencias pero es el instrumento que nos representa, tanto en sus formas como en su construcción y sus materiales. Esta ha sido una breve introducción sobre el bombo legüero que hoy reconocemos como instrumento musical pero que en su momento tuvo otras funciones. Una de ellas era la de comunicar".
"No sé si sabían que con el bombo legüero en otras épocas se hacían comunicaciones. Vitillo Ábalos [1], en una entrevista, que había tenido la posibilidad de conocer en el monte gente que daba comunicación con el bombo cuando se daba una noticia o se producía una reunión. Hace mucho tiempo en el monte no había sistemas de comunicación. Y eso lo he vivido yo también. Yo viví con mis abuelos, hasta los 5 años, en Santiago del Estero, en pleno monte. Para ir a hacer las compras te tenías que subir a un caballo o un carro y "patear" varias horas. Cuando se carneaba las familias solían abastecerse de lo primero que necesitaban (charque, chorizo seco) y el resto de la carneada lo tenían que vender. Entonces se daba noticia a través del bombo para que los vecinos, a la lejanía, a 1, 2 ó 3 kilómetros campo adentro, se enteraran de que había una carneada y vinieran a comprar. Tenía una función comunicacional aparte de ser un acompañamiento musical".
"Actualmente los promesantes de San Gil [2], cuando comienzan a salir en peregrinación, comunican con su bombo que ésta se ha iniciado. Al escuchar el bombo los vecinos se enteran que ya ha comenzado la peregrinación. Si bien aún continúa formando parte de este ritual, en otros momentos ha tenido otra finalidad. Yo estoy haciendo una investigación sobre el origen y la historia del bombo. En uno de los libros de Carlos Vega [3], un musicólogo e investigador argentino de la década de 1940, se entrevistó con un carnicero en Tucumán que tenía la misma finalidad: hacía el mismo uso con el bombo. Cada vez que carneaba, el carnicero daba a conocer a sus vecinos que ya podían ir a comprar."
"Es un instrumento bien representativo nuestro y bien del NOA (Noroeste Argentino). Tronco de ceibo, madera muy porosa, muy liviana, quebracho blanco, parches de cabra, de chivo, tientos de cuero de suela. Es un instrumento al que las condiciones climáticas lo afectan un montón: la humedad, la temperatura (calor o frío). Constantemente lo está afectando y está movilizando la madera. Hay que tener una serie de precauciones, una serie de cuidados para que este instrumento, especialmente acá en Buenos Aires, para que podamos mantenerlo sin que se abiche, que lo agarre la humedad, que se pudra la madera o se pudran los parches. Entonces, la finalidad de esta reunión es hablar sobre esto, sobre el mantenimiento, teniendo en cuenta que esto es muy Pachamama, entonces cualquier condición climática lo afecta, ya sea la humedad o la sequedad. Es un instrumento que requiere de nuestra presencia constantemente, así sea que estemos tocando en una banda o tomando clases nos va a requerir que constantemente le prestemos atención".
"Primer cuidado que tenemos que tener en Buenos Aires es la humedad. En épocas de otoño e invierno siempre es recomendable tenerlo colgadito debajo de un alero o al sol tenue para que se airee, le dé el calor y se templen los parches. Y principalmente, tocarlo siempre. Tocarlo todas las semanas para que el bombo tenga vibración y las polillas no se asienten. Acá otro de los problemas que tenemos son las polillas. Si no les molesta a los dueños, voy a agarrar algunos bombos para dar unos ejemplos. Esto es un rastro de polillas (ver foto inferior). Cuando tenemos esto es porque adentro, quizás, nos encontramos con algo peor, porque adentro ya hicieron sus nidos".
Parche con rastros de polillas
"Y acá también [muestra otro parche de bombo] hay rastros de polillas. Y lo deja totalmente pelado al parche. Después sigue con la madera. Como les dije, esta es una madera muy blandita. Hacen nido y hacen agujeros en la madera. Es más, si se queda mucho tiempo asentado en un lugar y lo agarraron las polillas, ustedes van a encontrar el aserrín que van haciendo y se van comiendo. Entonces hay que tener mucho cuidado con eso".
Público:"¿Se puede tirar [al parche] algún producto antipolillas?"
Guille: "Sí, le podemos tirar antipolillas, pero lo mejor sería el sol, tocarlo, airearlo en otoño y en invierno. No en verano, sino colgarlo en la sombra , porque el sol directo te va a secar los parches y vas a pasar al otro extremo."
Público:"¿No sirve dejarlo dentro de la funda?"
Guille:"La funda sirve para llevarlo de un lado a otro, pero no para dejarlo estancado en la funda dos o tres meses, porque cuando lo saques de la funda van a empezar a volar las polillas. Hagas lo que hagas, le pongas naftalina, siempre se te van a meter las polillas. El cuero es un manjar para ellas. Con la suela y la madera se hacen un festín".
"Una cuestión importante es la afinación. Hoy un compañero trajo un bombo que no sonaba. Una preocupación. Cuando no suena y estamos tocando en un grupo o suena amplificado lo más probable que suceda es que rompamos el parche. Si el parche está flojo no vamos a encontrar sonido. Entre la amplificación y el sonido ambiente vamos a querer que el bombo suene y le vamos a pegar fuerte, cada vez más fuerte, y vamos a partir el parche. Y un parche flojo tiene mucha más probabilidad de que se rompa que un parche tenso. Porque un parche tenso resiste y rebota el embate del palillo. Ahora ellos van a hacer una clase práctica, van a hacer un poco de gimnasia. Entonces, cuando vemos que el bombo llegó a esta afinación [toca] este bombo está sonando".
Tensor del bombo
"Los tensores o afinadores (algunos le llaman templadera) sirven para afinar, si bien no tiene una afinación como la guitarra u otros instrumentos, le decimos afinar para que tenga un buen sonido a nuestro oído. Cuando llegamos a esta altura es que ya está el tope de la afinación. Si este parche no suena hay que hacer un procedimiento para que esto tenga más afinación. Ahora lo vamos a hacer todos, porque yo veo que todos esos bombos están en estas circunstancias. Van a agarrar cada uno su bombo y van a buscar dónde empieza el tiento. Acá tiene un lazo. Van a ajustar esto. Lo más práctico es sentarse arriba del bombo, sobre los aros (no sobre el parche), ver dónde empezó el tiento, dónde empezó el ojalillo o la presilla. Tanto la presilla, los afinadores, el tiento vienen de lo que hoy se llama talabartería. Los tientos son la rienda de los animales, del caballo. Hacer el freno, el lazo para el caballo. Todos estos nudos y esta forma de tratar al tiento derivan de ahí".
"Esto no es nada más ni nada menos que el tiento de las riendas de los caballos. Hay un instrumento muy similar a este en Colombia, para el cual se utiliza el árbol de palo borracho [ceiba speciosa], lo ahuecan, y si tienen oportunidad de ver el casco de ese instrumento que se llama tambora y el casco de un bombo legüero, es lo mismo. Lo único que ellos tienen un aro de metal, tienen parches de cabra, un aro de metal y usan sogas. Hablando con un luthier, en el proceso de investigación, le pregunté ¿por qué usan sogas ustedes? Es un instrumento afroamericano. Los descendientes afro usaron técnicas que ya traían (conocimientos para ahuecar el árbol) y con los elementos del lugar se hicieron los instrumentos. ¿Por qué, a diferencia de Santiago del Estero--que utiliza tientos--ellos usan soga? Porque son los elementos que nosotros tenemos a nuestro alcance. Los barcos descartaban las sogas y con ellas hacían sus instrumentos, los tambores. Obviamente, en Santiago del Estero no tenían barcos ni agua, entonces el elemento más cotidiano es el cuero, la suela. Van a encontrar en algún momento bombos con tientos crudos. Ya no se utilizan porque los tientos crudos necesitan mucho más mantenimiento, hay que estar engrasándolos constantemente., estirándolos, porque sino se ponen muy rígidos. El cuero de suela es con lo que aquí contaban. La rienda de los caballos van a ser los lazos. Por eso vienen estos nuditos. Podemos hacer otro nudo que sea mucho más práctico que ese. Pero esto es lo tradicional. ¿Por qué lo anudamos así? Porque lo que se hacía así eran las riendas y los aperos y los lazos". Por eso tiene este nudo. Es una forma de sujeción que se trabajaba en los lazos. Para los del bombo se trabaja con cuero o suela porque es lo que había a mano en esa época".
"La idea es buscar el lacito este que yo les decía o el ojalillo donde se empieza, y de acá empezar a tirar, a correr el tiento. A trabajar y hacer un poco de fuerza. Es empezar a correr los tientos, y acá en la primera vuelta ya me sobraron unos 20 centímetros. Vamos a seguir ajustándolo. Este es un trabajo que van a tener que hacer cada tanto, porque todo esto es Pachamama, es madera, es parche, es cuero, se estira. Tiene movimiento, tiene vida. Se sigue estirando, sigue trabajando. Cada tanto, cuando los afinadores lleguen a su punto máximo, vamos a tener que hacer esto. Es un poco más de trabajo pero no es nada distinto al mantenimiento de cualquier otro instrumento. A una guitarra hay que cambiarle las cuerdas, afinarla constantemente."
Video 1: Afinación del bombo
Guillermo Giménez: "Guille, si tenemos la oportunidad de comprar un bombo, conseguimos uno a buen precio y encontramos el parche con el signo de que las polillas se alimentaron de él..."
Guille Soria:"Tiene buenos materiales pero el parche esta apolillado. El parche se puede cambiar. Cuando vayan a comprar un bombo tengan en cuenta algunas cosas. Si pueden comprar un bombo de luthier, mucho mejor. Si saben quién lo hizo, mucho mejor. No hay nada más lindo, nada más gratificante que ustedes sepan que una persona puso toda su energía y sus conocimientos en un bombo que va a ser para vos. Lo que hacen los luthier son instrumentos personalizados. El que trabaja como luthier sabe que está poniendo toda su energía para una persona en particular y lo hace a conciencia. Si el día de mañana llegan a tener algún problema con el bombo, saben a quién recurrir. Hay muchos bombos que se venden por Mercado Libre, por otras páginas de internet, que te dicen envío bombo ya o entrega inmediata, directo de Santiago. Esas cuestiones no significan garantía de calidad. Hay muchísimos bombos que ustedes los van a ver por fuera, pero como no saben a quién se lo están comprando por dentro están totalmente horribles, la madera es verde o no está añejada, no está secada y quizás tenga mucha humedad por dentro, o no suene bien, o las medidas de los aros no coinciden con la boca del casco, o la medida de los arillos donde se cosió el parche no coincide con la boca del casco. Esta es una de las cuestiones que quiero recomendar siempre. Ante la compra de un bombo nuevo sepan de dónde viene y quién lo construyó. Obviamente, no siempre es así el caso. Quizás me llegó el bombo de alguien y la Pachamama siempre da una segunda oportunidad: las maderas se pueden restaurar, se pueden lijar, se pueden achicar, agrandar el aro y reconstruir o terminar el trabajo que no se hizo adentro."
Público: "¿Qué significa el término yapado?"
Guille Soria: "Hay una técnica de ebanistería que consiste en pegar en línea recta muy finita, que no se note. Puede pasar porque quien construyó el bombo tenía un tronco muy grande y le sale como de 50 cm, así que le saca la lonja, lo achica cuando la madera todavía está verde, lo encola. Si el trabajo está bien hecho no pasa nada. En la mayor parte de esos casos el agregado (yapado, de yapa) se hace porque tenía una rajadura o tenía el signo de algún nudo, le sacaron ese nudo y lo encolaron. Uno va a comprar el bombo y no lo ve por dentro. Es muy importante también cómo se termina el borde del casco donde va a asentar el parche. El 99% de los bombos que yo encuentro en el taller, que han sido comprados por internet, no tienen los bordes terminados. Entonces los parches se agarran al borde, o está todo serruchado sin terminación, sin lijar. Entonces cuando uno presiona los tientos para que este aro de quebracho baje y aprete un parche o lo baje al parche, éste está agarrado al casco y no baja, no afina, entonces el parche queda flojo, no suena. Uno compra un bombo, pagó cierta cantidad de dinero, no le afina, le tira los tientos, hace el procedimiento y sigue sin sonar. Lo lleva a cualquier luthier o a alguien que repare bombos y habrá que terminar el caso, lijarle los bordes, y es otro gasto más".
Público:"¿Hay medidas específicas del bombo o depende de quien lo hace?"
Guille Soria:"Mirá, depende mucho de cada uno y para qué lo va a usar. Hoy, dentro de lo que es la rama del bombo legüero, tenés muchas disciplinas. Tenés el acompañamiento, la música, pero también tenés la gente que hace malambo; hay muchos grupos de mujeres hoy en día que utilizan bombo dentro de la coreografía de baile. Ahí sí es importante el tamaño y la fabricación del bombo. Si alguien va a hacer bombo fantasía, malambo o coreografía de danza con bombo, lo más probable es que utilice un bombo chico, liviano, de cuerpo ligero, muy bien cavado hacia dentro para que no pese. Imagínense: lo van a tener en un show 30, 40 minutos y no puede estar el bombo interfiriendo o molestando cuando tienen que hacer una coreografía y eso. Por ejemplo, un bombo grande para una bailarina, en un giro el bombo va a seguir girando, la bailarina va a volver y seguir dando vueltas o la va a tirar. Generalmente se elige un bombo más chiquito, más versátil, y con parches de chivo, parches gruesos. Porque a la gente que hace este tipo de shows les interesa más el espectáculo que el sonido en sí. Si viene un músico que tiene que grabar un disco o algo por el estilo se le recomienda un parche de cabra, que tiene un color más dulce, con otros graves, ¿no?. Ya es distinto. Depende de lo que tenga cómo va a ser. En una agrupación tradicional, donde va a haber 3 o 4 guitarras, violín, primera voz y bombo, se necesita un bombo con una presencia así (grave y que tenga presencia escénica). Un ejemplo: el baterista de Jorge Rojas tiene un bombo chiquito (35 cm de diámetro) porque lo usa de acompañamiento y porque tiene todo un set de batería y el bombo acá, microfoneado, con una pedalera. Ya el sonidista le maneja los graves."
Ejemplo de bombo chico
Público: "¿El largo tiene que ver con el diámetro [en el bombo]?"
Guille Soria:"Sí, yo tengo una regla de calibrar. Hay constructores que cortan el árbol y le dan una medida no específica. Yo tengo, sí, por unos estudios que hice sobre acústica. Hay una relación entre diámetro y largo que yo la traigo de otros instrumentos de percusión, no de bombo legüero, sino de otras técnicas de construcción. Porque mi trabajo trato de perfeccionarlo. Los músicos se van perfeccionando, las técnicas se van perfeccionando, los músicos se vuelven cada vez más exigentes, entonces uno tiene que hacer un instrumento que satisfaga esas necesidades y exigencias del músico. El músico de Jorge Rojas está tocando un día acá, mañana en la Patagonia, pasado mañana va a estar en Salta y no se puede estar fijando en la temperatura o la humedad. Tiene una exigencia y yo me tengo que adecuar a esa exigencia y a los tiempos de hoy también. Yo conservo las técnicas ancestrales de construcción, pero también me adecuo a las necesidades actuales. A veces uso otro tipo de materiales de acuerdo a las necesidades".
Público:"¿Los afinadores están todos alineados?
Guille Soria:"Los afinadores tienen que estar todos alineados en la misma medida para la presión justa o la misma presión en distintos tipos de parche. Cuando uno va a afinar lo más conveniente es que uno lo haga así, de a pares, y siempre a la misma altura".
"No quiero irme sin compartir una definición que encontré de Atahualpa Yupanqui. En la década de 1970, Yupanqui dio una entrevista a la Televisión Española, esa famosa entrevista en la que surge qué es un amigo. Atahualpa Yupanqui nos dejó un montón de conocimientos poéticamente. Dentro de mi trabajo de investigación me pareció importante lo que dijo en la entrevista, no solamente por la definición que él dio, sino también por la ubicación de tiempo y espacio. Atahualpa Yupanqui contaba en esa entrevista que cuando él era chico su empleado era empleado ferroviario (y también domador) tuvo la oportunidad de viajar al monte, a visitar a la familia en Tucumán. Era en su preadolescencia. Contó que allá conoció el bombo. En el sur [en la provincia de Buenos Aires] él no conocía el bombo. No se hablaba acá de bombo. Había oído hablar en la escuela del kultrún [instrumento mapuche], pero aquí en la pampa no se conocía el bombo. Él se encontró sorprendido por ese instrumento y dijo: ¿qué es esa quejadumbre que transmite el bombo? Contaba Atahualpa que la gente, con esas deliciosas mentiras que tiene, decía que esa quejadumbre era el jadeo de la tierra cansada de dar frutos. Miren qué poético. Y es eso. El bombo no es nada más y nada menos que la tierra, nuestra tierra. Y como empezamos a hablar hoy, es madera y es parche, es todo Pachamama. Si dejamos un bombo tirado en un monte con el tiempo se vuelve cenizas y vuelve a formar parte de la tierra. Es un instrumento que no va a contaminar. Y si hablamos de monte y de esto que es tierra, yo recuerdo algo que decía mi abuelo: que el bombo es el latido del monte. Como hoy hablábamos de esto que es comunicar, en el monte--a lo lejos--no se escuchan los sonidos agudos, se escuchan los graves. En la lejanía, en una fiesta de trinchera, se ponen a tocar chacarera y no se escucha el violín, no se escucha la guitarra, no se escucha el aro. Se escucha solamente el parche, que atraviesa el monte. Por eso se le dice legüero. A la distancia se escucha.. [toca reiteradamente el parche con el palillo]. Y esto no es música. Es nada más y nada menos que el latido del corazón. Y este latido de corazón [sigue tocando y lo acompaña el resto de los bombistos. Ver video debajo].
Video 2: Chacarera en bombos (toque colectivo)
Guillermo Giménez: "Gracias, Guille Soria, luthier del oeste, de Ituzaingó. Del oeste y para el mundo porque Guille va recorriendo y llevando sus saberes por todos los lugares que lo invitan, por todo nuestro país. Agradecidos de tenerlo acá. Uno más de los tantos hacedores de la cultura de nuestro pago chico del oeste del Gran Buenos Aires. Un ejemplo del Gran Buenos Aires. Tanta gente que hay que hace música, danza, arte en general en diferentes lenguajes. Y lo tenemos a Guille como un exponente más, disfrutamos de su presencia, y para que este encuentro continúe vamos a ir al Auditorio, no sin antes darle el último aplauso a Guille Soria". [Aplausos]
[1] Vitillo Ábalos (Víctor Manuel Ábalos, 1922 - 2019), ha sido un compositor, cantante, folklorista, músico y bailarín argentino, integrante del conjunto santiagueño Los Hermanos Ábalos durante casi 60 años.
[2] San Gil, santo venerado por la Iglesia Católica. Su memoria litúrgica se celebra el 1° de septiembre.
[3] Carlos Vega (1898 - 1966), musicólogo, compositor y poeta argentino. En 1930 inició un proyecto de relevamiento musicológico del folklore argentino, registrado en 1700 grabaciones fonográficas y archivos fotográficos y documentales.